12/12/2010

| COMPLICIDAD |

A
migo ¿por que te sientes mal?; me pregunta ella. Siento un poco tristeza por todas las cosas maravillozas que ocurren en mi vida, pero a la vez ¿de que sirven? realmente de que pueden servir si hay momentos en que no tienes con quien compartir todas esas cosas buenas o malas, alegres o tristes que llenan mi vida desde hace algún tiempo, ¿realmente sirven? se que sí, alguna vez alguien me dijo, ¡hey! un poco mas de cordura y un poco menos de sufrimiento, cuanto poder puede tener esa frase en un dia como hoy, pero tambien es cierto que hay momentos en tu vida donde quisieras tener esa mujer, ese complemento perfecto, para poder desarrollar completamente cada una de las cosas que ocurren diaramente, como llamarle a esa persona; que se yo, mujer, amante, polola, novia, mamá, en fin, cuando me preguntan cual es mi definición de mujer de vida, lo resumo siempre una frase, la que es mi complice, la que me acompaña en la vida. Extraño esa complicidad absoluta que se traduce en un solo gesto, esa que no necesita de palabras, que con señales lo dice todo, la que no necesita aprobaciones, con un guiño se da por hecho, la que no pide sonrisas, la que las entrega y te traspasa una que cambia tu día completamente, hay miles de señales con las cuales de seguro no podría terminar nunca, pero bueno esa es la "cuestión"; complicidad, mutua por supuesto y que de complice ahora, tiene muy poco. Es rraro, pero quiero que quede claro, que no recrimino nada de mi vida, mi vida es fantastica y agradesco a Dios por ello, el tema es que hay dias, momentos, tiempo, horas, donde es necesaria esa complicidad, la complicidad es una paradoja, como la vida, y es que una complicidad compartida, siempre se transformará en un complicidad unica.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Eres mi yo hombre...
Este texto, podría haberlo escrito hoy mismo...Mañana tal vez...
Besos supervivientes desde España!.

(http://sobrevivire.blogspirit.com)